Adulterio y fornicación. ¡Qué malos hábitos!

 ¡Mi amigo Arcadio!  El primero y único hijo espiritual que hasta el día de hoy he engendrado.  Tal y como dijera aquel simpático viejito de la serie animada de los ochenta, del asombroso hombre Araña: "Se robaron el reino las malvadas. Ah, qué tiempos aquellos"...
 Es curioso y en ocasiones tan sencillo la manera de irle poniendo tropiezos a nuestra vida, mas aún si sólo tomamos el papel de creyentes, desde luego no podía faltar el enemigo haciendo la parte que le corresponde para aplicarnos la clásica sancadilla.  Pero qué bendición haber sido uno de los pioneros en mi congregación empezando a traer almas nuevas al templo, de hecho es muy gratificante saber que estás llevando a cabo una de las más importantes y principales enmiendas... Nada menos que evangelizar.
Parece como sentir que Dios te da un gran premio; sin embargo, esa vez se trató nada menos que del principio de una de las más grandes batallas que viví en aquel centro cristiano, en la que si Dios no hubiese estado conmigo, me habría sido prácticamente nulo ganar.
 Temo que fui muy estricto con mi pobre amigo a raíz de cuando empecé a doctrinarlo, terminé haciendo de él un auténtico y ferviente amante de la ley más que de la gracia, lo digo así por que mis exageraciones no terminaron ahí.  Primero logré que se deshiciera de sus discos compactos, al igual que de todo lo que pareciera ser maligno; en fin... Traumé tanto al Arcadio que ya veía al diablo hasta en la sopa, lo subyugue al grado de reprimirle de un tajo:  Ciertas costumbres que no mencionaré por cuestiones de ética ministerial, ¡Okey, okey!  Creo que tendré que decírselos, la realidad es que batea zurdo el fulano.  Por otro lado debo admitir que fui demasiado extremista, y es que gracias a la forma tan inmadura ( de mi parte ) en que lo lleve a los pies del Señor, tristemente lo orillé a la desesperación, lo que por lógica hizo que regresara a las andadas, aunque ahora con la pequeña diferencia de ya conocer al Dios verdadero y de las cosas que ciertamente él no admite y por supuesto no aprueba.



  Todo el asunto comenzó con una linda joven que vendía chuchulucos afuera de la iglesia, me refiero a dulces y palanquetas, huesitos, pepitas, cacahuates garapiñados y otras cosillas más.  También tenía una linda bebé al igual que su pareja ¿o esposo?  Bueno, en mi caso parece ser que me flechó Cupido.  De modo que no quise entender por las buenas en que situación tan delicada me estaba metiendo, mientras tanto Arcadio buscaba y se consagraba más a Dios, se podría decir que estaba conociendo del primer amor, luego para colmo de los colmos esta mujer de quien les hago mención, empezó a frecuentar el templo, es decir, si por algún momento quise estar lejos de ella, después ya me fue imposible. 
 Creo que era lógico, por más que yo intentaba escaparme ¡Ella estaba ahí!  Y es que diario había siempre predicación.  Bueno, con decirles que a los pocos días me vi tan enfermito y obsesionado por ella, que a veces no recordaba siquiera mi nombre, ¡Charros!  Luego el diablo empezó a darse cuenta que podía matar a dos, o mejor dicho a tres pajaros de un tiro, es decir  1-  Que le diera un mal testimonio a Arcadio,  2-  Que el ministerio mío mengüara y me convirtiese en la burla de todos en el templo, y 3-  que Elí-azar tuviera otro pretexto para tenerme sentado de tres a cuatro años en la banca.  Ustedes seguro dirán: ¡Fue lo menos que te merecías por descarado!
 Pasados seis meses, llegó a la capital un supuesto evangelista llamado Morris Serúlo, si vieran la cantidad de ingenuos que fueron a verlo incluyéndome a mí ( y tener que pagar 100 pesotes, para únicamente ver desde las tribunas a un viejo panzón )  No me lo crean pero me dieron ganas de llorar cuando vi a tantos "cristianos" ignorantes.  Es como una plaga mental cual siempre será difícil de exterminar.  Y cuándo digo cristianos, nótese que lo pongo entre comillas eh, NO es mi intención querer desacreditar el nombre de Jesucristo, pero tengo qué decir la más absoluta verdad.  Algunas de las tres mil personas que fueron a dicho evento recordarán que se escuchó una supuesta risa santa, que no fue otra cosa que el mismo demonio burlándose de la Iglesia.  Caray... Ir a gastar el dinero por únicamante ir a ver un viejo gordo y millonario, dizque evangelista? ¡Puff!



 Antes de llegar a la Arena México, le pedí a Laura que se fuera con los demás hermanos y después la alcanzaba.  Luego su esposo con la pura mirada me dijo: Quiero hablar contigo.  Me quedé un rato esperándolo en la carretera y acabara de cruzar el puente, enseguida que atravesó se fue aproximando hacia mí para decirme ¿Qué onda con mi esposa?  Yo le dije ¿Que onda de qué?  Afortunadamente la relación no había pasado más allá de la manita sudada gracias a Dios, entonces le dije firmemente -  Mira, el hecho de que tu mujer venga al templo no significa que yo ande con ella, además no es mi estilo hacer esas cosas  - Le dije por último -  Puedes ir al templo tú también, y quedate tranquilo que tu esposa está en buenas manos.  Temo que más cínico no pude haber sido. verdad?  A veces lamentablemente esa es una de las ventajas de haber conocido a un pastor mañoso y cobarde como lo es Elí-azar, que por otro lado se enriqueció con los 13.000 pesos que le robo al hermano Alberto.  En cuanto a mi terrible experiencia todo pasó... Cuando vi a Laura y a su nena, supe exactamente que ese sería el único y último instante que podía aprovechar, pero nunca imaginé que un simple beso nos causara tanto dolor en un futuro a ambos.  Para empezar Arcadio dejó de ir al templo, diciendo de esta manera -  Si así son los cristianos mejor me quedo con mis santos.  Por otro lado a Laura le fue arrebatada su hija y jamás volvió a verla.  En cuanto a mí, como se los dije antes, fui el objeto de burla para todos los congregantes de Eternia, inclusive hasta me pusieron de apodo el As.  Luego de unos meses le pregunté a un condiscípulo mío. Tenía por nombre... ¿Cómo se llamaba éste cuate...?  Hmmm ¡Ah. sí!  Ya me acordé, se llamaba Ken.  Entonces le dije, oye ¿Tú sabes porqué en el templo todos me dicen el As?  Esbozando una ligera y maliciosa sonrisa, bajo esos ojos azules de gato, se compadeció de mí, aclarándome rápidamente la duda, ¡Ah pues... No sabías!?  No, dime ( le dije ) Y respondiendo me dice: ¡Fácil..!
Te decimos el As porque eres el As-me reír de la iglesia jajajajajaja.  Parece que Laura siguió buscando de Dios, mientras yo seguía tratando de no ser un bufón más, es decir, cada quien tomó rumbos distintos.  Lo que obviamente me obligó ausentarme largos días.

 

  

 

Después que regresé, sabía bien que ya no estaría.  Se fue, no dijo adiós, escapando así de mi vida.  Y tú que si estás aún leyéndome, preguntas por qué la seguía yo extrañando a pesar de las heridas... Será algo que de momento no te podría responder ( Espero lo comprendas ).  Laura quizá ya me olvidó, pero yo aún tenía el sabor de mis sueños para con ella, no obstante los planes que Dios tenía para mí eran completamente diferentes, y ahora, aunque dolió haber roto aquella relación prohibida, le doy gracias que haya podido cambiar el curso de los acontecimientos.  Finalmente y para desgracia mía:  El ministerio que yo estaba empezando a ejercer se vino abajo a partir de aquella triste experiencia, y es que al único nivel que pude llegar en mi iglesia, fue el de levantar las ofrendas, ¡Y ni eso siquiera eh!  Ya que un niño de 6 años se peleaba conmigo por el ofrendero, que humillante ¿No les parece?  Pero tuve los calzones siempre arriba ( dicho sea en toda la extensión de la palabra )  No me avergoncé pues seguí adelante buscando de Dios, aún a pesar que durante los siguientes cuatro años, siguiera siendo el hazmerreír del centro cristiano.  Arcadio siempre me recordaba en la cara el mal ejemplo que le di, ¡Me caía tan mal cada vez que lo escuchaba. No había día que no me sintiera culpable por aquella gran ofensa que le hice a Dios, a mi iglesia, al templo shaolin y por último a mí mismo!  De hecho llegó un momento que acabó con mi paciencia este sujeto. Así que le dije: Yo también tengo problemas idiotón, luego le platiqué de mi vida pasada y dejó de estar fastidiando con la misma cantaleta, después de haberle rebelado mis más obscuros secretos:  Mi amigo comprendió que no era él la única persona en el Mundo con problemas.
 He visto testimonios poderosos de personas a las que Dios ha transformado completamente, así como lo hizo conmigo y como lo puede hacer con cualquier persona que confíe en el gran poder restaurador de Jesucristo, sin duda es realmente su grande amor el que nos hace libres.

 


 Dios es muy sabio y sus pensamientos difíciles de comprender.  Él sabe lo que nos conviene, en este caso a los que tratamos de obedecerlo.  Antiguamente los grandes patriarcas tenían la falsa costumbre de poder tener de dos a tres y hasta más mujeres como esposas, o mejor dicho:  Concubinas, no obstante la Biblia es bien clara, eso fue algo que jamás pasó por la mente de Dios, ya que la mayoría de ellos tuvieron problemas bastante serios, como el caso de David ( con Betsabé ) y las terribles consecuencias con sus demás hijos, por no mencionar que uno de ellos violó a su propia hermana para después su otro hermano Absalón lo matase por venganza, o el clásico de clásicos nuestro padre Abraham, aquel que le quiso ayudar a Dios, que ya "bien forzado" se acostó con Agar. Luego más fácil después, la abandonó a su suerte y que gracias a ese acto de negligencia efectuado por Sara y Abraham, hoy día se siguen matando estos dos hermanos ( Ismael e Isaac )  O mejor dicho -  DOS NACIONES   Gálatas 4:24, 25 y 29.

 

 Para mí que eso de los "Patriarcas"  Pienso que era un simple formulismo, bien sabemos que Abraham terminaba haciendo lo que Sara le decía ( No nos hagamos tarugos )  Podría mencionar otros casos, espero que con éste se refute la idea de que uno (a)  Puede estar con quien quiera. Y que nada de nada, son puros inventos del hombre que únicamente quiere estar desflemando el cuaresmeño: Dónde, cómo, y cuándo sea.  Claramente dijo Dios:  No es bueno que el hombre esté solo, pero jamás nunca dijo él -  No es bueno que el hombre tenga sólo una mujer.  Y lo mismo va para con el género opuesto, lamentablemente en estos días vivimos un Mundo donde el adulterio y la fornicación se dan a la orden del día.  Creo que el ser humano aún no se ha dado cuenta de los terribles lazos espirituales que lo atan cuando comete adulterio, lo que implica la corrupción de su alma y por ende, su muerte espiritual y eterna.  El caso más desconcertante fue Salomón, quien después de haber sido un hombre sabio, lleno del Espíritu de Dios, se convirtió en un poderoso hechicero que podía invocar e incluso controlar a los demonios, cayendo de la gracia divina al entregarse en pos de mujeres extranjeras que lo llevaron al desenfreno y a la locura, ofreciendo sacrificios a Moloch, un ídolo de los canaanitas y fenicios.

 

 

  

 Lo consideraban el dios del fuego purificante, el que a su vez simbolizaba al espíritu. Creían que.. Como resultado de una catástrofe ocurrida en el comienzo de los tiempos, ese espíritu se había transformado a sí mismo en oscuridad al convertirse en materia.  Según las creencias fenicias de acuerdo con la herejía nóstica, el hombre era la encarnación de tal tragedía ontogénica que, para redimirse de ese pecado era necesario ofrecer sacrificios a Moloch inmolando bebés por ser considerados los más impregnados de materia.  Lanzar niños recién nacidos al fuego constituía el más agradable sacrificio que podía ofrecerse a esa implacable "divinidad"  representada por una gigantesca estatua de bronce que encerraba un horno en su cavernoso cuerpo.  Luego las madres arrojaban a sus propios hijos vivos, en el incandescente vientre de Moloch, el que esperándolos de brazos abiertos, devoraba por el fuego a sus pobres y pequeñas víctimas.  Y para atenuar la repulsión causada entre los que asistían a tales escenas, los inicuos sacerdotes tomaban el cuidado de hacer tocar trompetas y rufar tambores para sofocar la infernal melodía de los gritos de los inocentes.  Así, sin pena ni piedad, en aquellos tiempos Salomón, al igual que los fenicios, mataban cientos de criaturas.  En pocas palabras Moloch representaba a Satán, Baphomet, Lucifer, Diablo, etc, y es el dios al cual muchos siguen ofreciéndole sacrificios, si no de niños, de sus propias vidas a su servicio, con tal de obtener riquezas, fama y poder.          




                                     

                 EN RESUMEN



  La gente del mundo no tiene ni idea de las desgracias que se ocasionan al tener relaciones sexuales, es decir, coito con otras personas que no sean su pareja; esto se debe a que al ayuntar de esa manera, se da una transferencia de espíritus demoníacos, que sólo el poder restaurador de Jesucristo, será quien pueda dar libertad de aquellas cadenas.  Ahora bien, si quizá cabe en mí darte un consejo, sería precisamente el de Pablo: Es mejor casarse que andarse quemando, ya que el matrimonio es una institución que Dios estableció y se debe estar totalmente comprometido a ella.  Los verdaderos predicadores han revelado lo mismo... Cuando una “pareja” se une sexualmente sin ser marido y mujer bendecidos ante Dios, adivinen quién es el que los tiene abrazados.. Sí, efectivamente es Satanás quién está con ellos, y abraza todas las noches a los que viven en unión libre, fornican o cometen adulterio, los acaricia saboreándose el sufrimiento que vivirán aquellos que se condenen por esa conducta.  Si una “pareja” pudiera ver lo que los acompaña durante el acto de adulterio o fornicación se llevarían una horrorosa sorpresa.  En el caso de los jóvenes la principal estrategia del Diablo es convencerlos de que no es necesario casarse, primero los lleva a las relaciones prematrimoniales a veces con uno y con otro y después ya le resulta muy sencillo que esos jóvenes que se han formado en la fornicación terminen viviendo en unión libre el día que forman un “hogar” ( hogar en que el Diablo reina, claro está ).  Así los jóvenes se acostumbran a vivir hoy en pecado mortal y muchos así durarán el resto de sus vidas a causa del mal al que se han acostumbrado.  En el caso de los matrimonios el principal truco que el enemigo usa para destruir una familia es la traición conyugal, pero él no es tonto, antes estudia los gustos y necesidades de cada uno de los esposos, medita tranquilamente cuál es la carnada más certera para atraer sin error a su presa, comenzando a generar peleas y el alejamiento íntimo de los cónyuges. ( Por ello es que no se debe interrumpir sin causa justificada, dentro del matrimonio, la convivencia sexual entre esposos ). Después el demonio crea situaciones en que la convivencia se hace difícil hasta llegar a ser insoportable, crea una nube de desánimo e inconformidad donde la esposa pierde las atenciones y admiración por el marido y este a su vez se vuelve indiferente e intolerante hacia su esposa.  Aquí es donde comúnmente ambos comienzan a descuidar sus responsabilidades, por ende a pensar en la separación.  Luego ya que el escenario está montado, el padre de la mentira envía a sus emisarios, es decir ( personas que viven habitualmente en pecado mortal y muy, muy lejos de Dios, de la Iglesia y la santidad ) Estos individuos son enviados directamente hacia la presa como exquisitos manjares en forma de atractivas mujeres y hombres atentos que tratarán de endulzarle el oído a aquella mujer casada.  En realidad estas piezas son ilusorias, lo que además las hace interesantes, entonces se inicia el proceso de destrucción de la familia, y luego todo se convierte tan sólo en una ilusión.  Todos tenemos problemas, la vida de nadie es perfecta, nadie será tu media naranja a menos que tú estés dispuesto (a): a perdonar y a dar. Lo más importante es saber que Satanás aplicará todas las armas que él tiene en sus manos ( Debes saber también que si tú vives en éste estado de pecado mortal, eres una herramienta más que el Diablo usa ) Y así pacientemente como un Lobo rapaz ataca a cada pareja esperando quién va a caer

primero.  Ahora bien, si tú sientes el deseo de traicionar a tu esposo (a): La culpa no será del Diablo, sino tuya; él solamente está usando lo que tú le has permitido que siembre en tu mente y en tu corazón, para después meter dentro de tí el deseo de estar con otra persona, y caro lo cobrará si no huyes y vuelves pronto a Dios quien te ofrece toda la ayuda para salvar y fortalecer tu matrimonio.  Un espíritu débil no tendrá fuerzas para luchar con la carne llena de voluntades ni con una mente encubierta de mentiras que Satanás ha lanzado.  Todo lo que tú necesitas para ser feliz, está en tu casa, así que no te engañes.  SUJÉTATE A DIOS y a tu esposo, y el Diablo huirá de ustedes.  ¿Por qué ir a buscar una hamburguesa fuera, si en casa tienes ya tu bistec? Espero no caer en una herejía, pero yo creo rotundamente que la Biblia no enseña que la "vieja naturaleza" pueda simplemente desaparecer en esta vida. La perfección no es posible, de otro modo ya no necesitaríamos de Dios. Es la culpa y la corrupción de la Naturaleza de todo hombre, la que naturalmente radica en la descendencia de Adán y Eva; por lo cual el hombre se ha alejado mucho de su rectitud original y está por su propia naturaleza inclinado al mal de modo que la carne codicia contra el espíritu; y por lo tanto merece la ira y condenación de Dios en toda persona que nace en este mundo. Esta infección de la naturaleza permanece también en aquellos que son regenerados; por lo cual la concupiscencia de la carne, llamada en griego fronema sarkos que algunos explican como la sabiduría, otros como la sensualidad, algunos como las afecciones, otros como los deseos de la carne: no se sujeta a la Ley de Dios. Pablo el apóstol sabía por propia experiencia que "el deseo de la carne es contra el espíritu" ( 1 ) y que las tendencias al mal frustraban sus mejores intenciones ( 2 ) El hecho de que los cristianos puedan caer tan a menudo, y algunas veces tan hondo, es un índicativo de esta lucha. Pero eso es para enfrentar esta necesidad que Dios ha provisto al "Paracleto" o ayudador en la persona del Espíritu Santo, y el don de la oración mediante el cual el hombre puede mantener comunión con Dios, aliviando la carga de su tentación y obteniendo así las fuerzas para enfrentarla. La necesidad de un "nuevo ambiente" ocasionalmente es suplida por la vida en comunión en Iglesia, pero sabido es que toda batalla debe ser personal. La presencia del Espíritu Santo es la seguridad máxima de que el espíritu triunfará sobre lo físico y, más aun, que finalmente tal triunfo será completo en la Resurrección. ( 1 ) Gálatas 5:17 y ( 2 ) Romanos 6:15-al 22.