SOMOS LLORONES CON GANAS.

   Algunos estilamos pensar que solamente vivimos del pasado. Les diré que sí, pues ¿Quién no es quien es: si no es gracias a su pasado?  Vaya juego de frases. verdad?  Mas si lo entienden podrán saber de lo que hablo.  Otros más suponen que son precisamente nuestras vivencias las que hacen de nosotros... Los individuos que actualmente somos; sin embargo, tropezar, fallar, equivocarse, resbalarse o caer, no necesariamente es un error o una falta, ¡No levantarse después: Sí lo es!  El pasado puede doler, pero como yo lo veo, se puede huir de él o aprender de él.  Les invito a ejercitar sus recuerdos para así evitar olvidarlos; verán que todavía se puede arrojar mucho de ellos.  Dicho sea sin albur y en el buen sentido de la palabra.  Ya más de una vez me lo han dicho, ¿A quién le va interesar tu patética y miserable vida?
 Ciertamente esto lo he querido aclarar... Que la idea general no será de obligarlos a conocer mi absurda manera de vivir, pero sí que vean desde un amplio análisis, las carencias de valores que han existido durante siglos en este país, no sólo en mí, sino en el ser de cada individuo.  Créanme que no ha sido nada fácil elaborar todo esto, tampoco estoy pidiendo que me admiren o se conduelan, ¡No, no!  Nada de eso, lo que trato de decir es que cualquier proyecto llevado a acabo, requiere de cierta entrega al igual que dedicación.  Aunque lo duden llevo años corrigiéndome, además no creo que sepan lo agobiante que puede ser eso.  Reconozco que soy demasiado tosco y admito además que quizá no hago las cosas bajo una prescripción teológica ordenada al igual que sistematizada en todo lo que concierne a la metodología Bíblica, pero...
Aún con todo ello puedo estar seguro que lo dicho hasta hoy en éste espacio, es porque las cosas no siempre son lo que parecen, lamentablemente cada quién interpreta las Escrituras como mejor le convenga, COSA QUE NO DEBE SER.  Lo digo así para no tratar de tener siempre la razón.  Busco simplemente ser realista, dejando los tapujos y mentiras, exponiendo lo que he podido vivir en cuanto a lo que profeso.  Tristemente han sido cosas nada agradables, pero no por la actitud de los demás voy a dejar de buscar a Dios, no, de ninguna manera, sino que sigo adelante tratando de entender el propósito que el Señor Jesús está queriendo hacer conmigo, así como en ustedes.



  También he podido entender que la mayoría de nosotros buscamos regularmente dos metas en común: Ser egoísta o ser accesibles, es decir, podemos ser tan necios y torpes como queramos, o en su defecto... Todo lo contrario -  Sentarnos, reflexionar y meditar en aquellas cosas que aún podemos mejorar y modificar.  Si en un principio dije que "Ya me la sé"... No fue con el afán de exaltarme, sino de expresarle al mundo que pude abrir los ojos de mi entendimiento, y que este tiempo ( aún si fuere breve )  Deba aprovecharlo al máximo para tratar de persuadir a mis semejantes.  Creo que todo es posible realizar si uno lo quiere y sin resignarse a aceptar las realidades que se estén viviendo.
 Probablemente sea muy duro en mis conceptos y tal vez termine siendo catalogado como un simple rufián desobligado, orgulloso, rencoroso, peligroso y hasta baboso, pero nada me daría mayor gusto que alguien se proponga defender las verdades y prioridades que ameriten ser tomadas en cuenta dentro de la iglesia, para que ya crezcamos espiritualmente ( que por supuesto éstas mismas vengan de parte de Dios ).  No miento pero tengo amistades a las que he podido hablarles de Cristo y a los tres días se van de este Mundo.  He ahí donde me puedo dar cuenta la importancia que es de no dudar hablarles de Jesús a los demás; algo muy importante es también entender que no sabemos a ciencia cierta cuánto tiempo el Señor dispondrá obsequiarle de vida a dichas personas.  Pero para tener el valor de hablarle a la gente, es necesario primeramente saber en quién estamos confiando, y así poder desechar toda incertidumbre o temor que exista, pudiendo estar seguros de lo que vayamos a predicarle a los inconversos.  Ahora bien, si tú eres de lo que se han hecho cargo de todo, o quizá dirijas todo un equipo, ¿Acaso lo de antaño no es igual que hoy en día?  Y era tan sólo ayer que meditaba en las personas más jóvenes del templo.  De pronto vi la resolución a todo ello en un chispazo... Si seguimos viviendo bajo un régimen eclesiástico, que ha sido durante años por demás intrascendente y desusado, sin ver la verdadera necesidad, dificultad y obstáculos que se presentan: ¿Cómo podemos seguir entonces para llevar la antorcha cuando ya no estés ahí?  Cuándo permitirás tú oh líder que sea vuestro turno? 





 
      PARA TODOS MIS CONTEMPORÁNEOS EN LA FE



  Cierta ocasión allá en el Instituto, en una de las clases que nos impartía un hermano que se llama
creo que.. Creo que.. Lugo. Chundo. Tunco Maclovio o algo así.  Se puso de vieja llorona a decirnos que le llegábamos tarde a clases y que se sentía muy triste y acongojado debido a la reprobable acción de parte nuestra por no llegar a la hora indicada. Se llevó creo alrededor de 20 minutos hablándonos de lo mismo, yo no lo soporté  - Así que me levanté a decirle -  Hermano deje de mortificarse y ya denos la clase por favor, si no desea impartirla váyase o simplemente cuando venga otra vez, a la hora que usted llegue: En ese mismo instante cierre usted la puerta del salón, y le aseguro que se evitará tantos corajes. Enseguida el "maduro" Ulises, ( co-pastor del instituto ) y al que se le habían perdido los trece borregos, me empezó a regañar, para colmo también estaba en la clase, diciéndome de ésta manera -  En vez de estarte quejando mejor cállate. ¿Qué no te das cuenta que el hermano expone sus sentimientos a flor de piel?  Lo que deberías hacer es llegar temprano.  Yo le respondí: Acepto haber llegado tarde como todos, pero ya estoy harto de que este señor se esté molestando porque según él, no entendemos nada. Si tan sólo él se levantara y nos enseñara en lugar de darnos un paquete de hojas  ¡Pero nooo!..  Como todos siempre aplica el peor método de enseñanza. ¡Lo que necesitamos es aprender cara a cara!  Tú sólo te estás molestando por que estoy señalando lo obvio, no porque esté robando su valioso tiempo; más bien te digo lo que se necesita hacer. ¿Quieres que los jóvenes entremos temprano a su clase y estemos atentos?..

 El hermano tiene pues que entrar aquí y hacer que se emocionen de la Palabra y no sólo dar una sarta de papeletas, digo... Si es que en verdad quiere ver un cambio y que mejoremos, ¡El tiene que tocar nuestro maldito corazón!  No puede esperar que cambiemos si nada más nos habla a medias, ¡Tiene que tomarse su trabajo en serio! ¿¡¡De verdad éste es el futuro que esperamos para el reino de Dios... con esta clase de sujetos!!?  ¡Puff!  Pero hay un límite, y no es que esté de Yolanda.. nada más quejándome; simplemente estoy haciendo una observación, incluso si te parece sensato... Bien podría yo aportar un poco para que dicho fulano aprenda a dar una buena clase, porque desde que llegué a este instituto, no he hecho nada más que leer paquetes de hojas.  Así que con todo respeto no intentes tomar credibilidad por corregirme un comino; pues no se vale que este individuo se haga el mártir y acabe con la media hora de estudio. - Luego terminé diciéndole -  Tal vez parezca disco rayado, pero siendo él un maestro, tiene que ser íntegro y firme en cuanto al cargo que según parece está tomando.  En cuanto a su demanda, para serte honesto a ninguno de nosotros nos interesa que esté sufriendo porque lleguemos tarde a su clase. Creo que él debe ser contundente, de otro modo nadie de nosotros lo va a respetar, por consiguiente terminaremos siempre llegando tarde cada que se nos pegue la real gana, pues el hombre que se burla de otro hombre: Se queda burlándose y se acabó.
 Como los rumores son verbales y las palabras viajan por el espacio, finalmente las ondas sonoras llegaron a oídos del director, y lógico, aquí el rebelde como siempre tenía que ser un servidor, o sea yo.  Terminada la clase y sin dejar pasar más tiempo, don Kwaild me llamó a su oficina para verificar qué era lo que me tenía tan molesto.  Luego de una conversación tensa e incómoda, el resultado de aquel incidente, fue que de los casi nueve meses que permanecí reclutado en el Instituto, no salí para nada, ¡Es más!  Ni para tirar rostro o distraerme al Pueblo.  Tres semanas después, cuando le pedí a Don Kwaild me dejara ir a ver a mis familiares con el fin de traer cosas básicas, como sería papel sanitario, pasta de dientes, rastrillos, jabón, desodorante, etcétera. Me dijo así -  Está bien, pero me regresas hoy mismo eh. ¡Ah!  Y me saludas a tu hermana.

 Luego de aquel sarcástico comentario, me fui molesto e indignado a mi casa, sin embargo pasé un rato ameno en casa de mamá, para finalmente regresar de nuevo al Instituto.  Reflexioné mucho por esa maldad que me hizo el viejo tarado, ya que a ninguno de los otros estudiantes les había hecho algo así, pues cuando el Kwaild los dejaba ir a sus casas, se iban desde el viernes en la mañana, para posteriormente llegar el lunes en la noche, es decir, me la quiso aplicar el cachetes de Bulldog, dizque se trataba de un castigo cual tenía yo que asimilar ya sea por las buenas o por las malas, y no conforme aún, el día que decidí retirarme de la institución, el muy abusivo quería exigirme reembolso de todos mis supuestos gastos en H.Q  según él, por la manutención de haber comido frijoles sancochados, a sabiendas que me aventé casi ocho meses haciéndole ladrillos para el bardeado del Instituto, ¡¿Cómo la ven desde ahí?!
  Pareciera que me la quiero pasar en estar criticando a la gente, y de preferencia a los ministros evangélicos. Pero no es tanto eso, sino lo que deseo enfatizar precisamente es lo dicho por el gran Proverbista:  El fin de todo el discurso no es que leas muchos libros o que te llenes de conocimiento capacitándote en un seminario. Lo que Dios quiere ver en ti, es que tengas un corazón dispuesto a servirle, sin imponer condiciones o que te andes quejando. Que lo ames verdaderamente con todas tus fuerzas, y cuando él te llame a su presencia, no le digas: ¡Dios mío apíadate!  ¡Ten piedad de mí. No quiero morir todavía!  ¡No he logrado nada!  ¡Sólo sácame de este apuro y haré grandes cosas!  ¡Por favor... Dame una oportunidad más!  Lo prometo... Puedo cambiar.  Tú bien sabes que te he servido, por lo que más quieras: ¡Todavía no me lleves.  Déjame quedar otro ratito aquí en la Tierra!  Y puras muletillas de esas.
 No esperes a que llegue ese momento.  Mejor aprovecha lo que Dios te está regalando para así poder hablarle a tus amigos, ya sea de la escuela o del trabajo, en vez de andar perdiendo el tiempo miserablemente, ¡Fuera de toda broma!  Busca a Dios, porque él también busca que le adoremos, pero no de labios para afuera, sino de corazón.  Te invito reflexionar, a que seas honesto contigo reconociendo que haz perdido el 'round'  Pero en Cristo podrás ganar la pelea.

 OTRA VEZ LA BURRA AL TRIGO.  SECCIÓN  6 

Me admiro tanto del tal Henry... Y quizá simplemente sea yo un desvergonzado hablando de asuntos que, se supone... Debe uno reservarse para sí. Pero les aseguro que las penas cuando tragan solas: Hacen mucho daño. ¡sniff!

Por el momento me adelantaré a decir esto: Posiblemente asumirán que ya estoy sacando el cobre con todas estas revelaciones, digámoslo de esta manera: Tan... Tan... Indiscretas?  O que tal vez quedé muy herido en mi último desamor.  No quisiera hablar de más, o quizá sí quiera hacerlo. Quién lo sabrá realmente?.. Mejor sean ustedes, mis estimados lectores, quienes resuelvan, calculen, y definan un poco el nivel de paranoia en que me encuentro, es decir, que tan confiable podría ser mi estado mental. 

Alguien muy cercano a mí, me dijo esta peculiar frase: "Piensa mal y acertarás"  Y ese "alguien" fue mi ex esposa.. Una persona realmente maravillosa. En ciertos aspectos nada más.  Pero cambiando el tema... A veces suponemos que somos parte esencial de un experimento más allá de la realidad. Una confabulación. Un complot directo hacia nuestra frágil vida, o incluso nos vemos semejantes al recuerdo de aquella misteriosa serie televisiva de Orson Welles.. Crónicas marcianas.  Algo parecido me pasó cierta ocasión que comía muy amenamente en un restaurante con Chloe... ¿Les ha pasado que sienten que alguien los está viendo, pero de pronto no se dan cuenta?  Bien, pues resulta que un tipo mal encarado con aliento de horno destapado, se acerca hasta nosotros  ( A lo que ella sólo asentó con una avisada sonrisa ).  La primera impresión que inevitablemente me causó el malandro, la consideré merecedora a un alto grado de sospecha infundada. Tenía un ligero parecido a Idris Elba. Sólo que en versión latina, y por supuesto más feo.

Lo primero que quise suponer, fue que tal vez era un conocido, o un vecino. Pero en fin... Para no hacerles tan cansada la plática, resulta que el fulano me empezó hablar en un tono, hasta cierto punto amenazante. Diciéndome que tuviera cuidado con las intenciones que yo tenía con Chloe. Que la respetara mucho porque era una muy buena persona.  Por un momento casi me sentí impulsado a decirle: ¿Sería tan amable de quitar sus sucias manos de la mesa?  Pero como siempre, y ante todo, y como el buen cristiano que soy... No me quedó de otra que guardar la cordura y seguir escuchando más estupideces. Tampoco me hizo falta ser tan inteligente, o quizá la crudeza de la vida que alguna vez acostumbré llevar: Hizo que mecanizara todo lo sucedido en cuestión de segundos.  Durante mi largo caminar por este yermo, he tenido la virtud de convivir con toda clase de personas, por lo que sé perfectamente cuando alguien ( Ya sea una dama, un profesor o cualquier otro individuo ) :

Me mira de tal forma como si no me supiese la Tabla del cinco.  Pero primero les platicaré un poco de la última conversación que tuve con mi amada, cuatro semanas después de mi regreso a México.  Fue algo breve, pero a la vez decía más que mil palabras.  Me dijo: "Quiero que sigamos siendo solamente amigos"  A pesar de la gran distancia que nos separaba... Ella sabía perfectamente que yo no aceptaría dicha propuesta. Una manera demasiado obvia para deshacerse de mí, y así acabar de una sola vez la relación. La cual era ya por demás toxica.

Me creyó tan ingenuo como para hacerme creer que quien estaba terminando el acuerdo, no era ella, sino yo.  Dejaré que siga creyendo eso.  No le hará daño que se preocupe unos años por ello. Luego, antes de pedirme que sólo fuéramos amigos... Me dijo estas otras palabras, que en lo particular considero yo las más importantes: "No quiero volver a pasar pobrezas"  "Tú lo que quieres es únicamente vacacionar, y no pensar en el futuro"  Fue entonces cuando le comenté: ¿Acaso quieres decirme algo más con todo eso?  Y sí... Ciertamente me dijo que su vida fue un infierno, muy DURA, que sufrió mucho. Y era lo que no quería ella volver a repetir. En este caso, conmigo a su lado.  Intuitivamente supe que hubo mucho en aquella explicación. Lo que me hizo volver a recordar, no sé por qué, al cambujo ese. Que para mi desgracia volví a verlo por última vez cuando iba pasando en un Lincoln oscuro. Muy lujoso el vehículo. Por cierto... ¿Olvidé mencionar a su guarura?

¡Bah!  Considero que con lo poco que yo vaya relatándoles, se puedan develar algunas cosillas. Esperando de corazón que todo lo expresado aquí, tan sólo venga de mi increíble imaginación. 

Posiblemente sufra de una severa demencia. O en su defecto... Solamente sea yo uno de tantos enfermitos mentales, queriendo asociar una cosa con la otra. Tan pervertido como desequilibrado. O que también suela sentirme despechado. Que tal vez no quiera yo reconocer que simplemente soy un pobre descerebrado, sin oficio ni beneficio. Que por consecuencia eso me de muchísima imposibilidad. Y que por ello posiblemente me quiera desquitar. ¿Pero de qué?  Lo más que tú quieras suponer ( amigo lector ):  Lo dejaré a tu juicio y consideración.

Ya casi puedo adivinar la opinión que algunos tendrán de lo aquí expuesto. Quizá diciendo algo como: Ahora sí ya la cagaste Burt Lancaster con todo lo que acabas de escribir. Pero al atravesar el espejo... Reconquisto el país de las maravillas del cual estoy impregnado.  La memoria impone y supone quién fui, pero lo niega la imaginación.  Nada es más diáfano. Y he ahí el enigma.. En quien creer ¿En la imaginación o en la memoria?  La memoria nos embosca y nos miente; la imaginación siempre es sincera. No acierto a separarlas, colaboran aun cuando son enemigas.  La memoria es implacable, dicta, escribe lo propio. La imaginación nunca es amnésica.  Leo estos cínicos registros de mi recuerdo, y... No son tentativas; son tentaciones. Inclinadas no precisamente a un erotismo perverso, sino a encontrar una verdad que hubiese preferido jamás saber. ¡Bendita ignorancia!

Por otro lado siempre es un riesgo que como redactores, conceptuemos lo que bajo el papel y la pluma manipulamos. Mientras que los demás analizan y observan de reojo, percibiendo cierta inquietud ambiental. Ya sea por inconsistencia o por falta de interés en la lectura.  Pero así es el río de las emociones cuando leemos cosas que no alcanzamos a discernir.  Personalmente no sólo tuve la suerte de tener un cuerpo obediente ( en lo que al deporte se refiere )  Sino también el instinto.        

    

 Me deslizo sin esfuerzo hacia esos lejanos momentos. Al estado de ingenuidad de aquel entonces.  Aún estoy en mi cuarto, en el legendario jardín de mi inocencia. Pero, ¿Por qué brotan hondamente vivencias que yacían profundas?  ¿Qué necesidad tuvo mi memoria de exhumarlas recubiertas de escombros?  Como que eso huele a traición mía. no?  Como quien salda una fuerte deuda de juego, o corta la flor que era suya. Como violetas, jazmines o tréboles de cuatro hojas prensados entre las páginas de un libro.  La sencillez de las remembranzas me provoca reconstruirlas. Como cuando recordaba a los niños traviesos de la misión, el sol, las piedras cuadradas. Temo que el vigor de su permanencia lo atribuyo a que son grandes descubrimientos. Y cada uno de estos son el grito de:  "¡Tierra!"  Después de un navegar interminable.  El miedo no era sólo a mi tierna y atroz humildad sometida en sus pronunciamientos más sutiles, sino a una represión enfermiza.  No obstante fui celoso al ambiente sin siquiera darme cuenta, me defendía sin advertirlo, a la vez que sangraba incolorante. No veía palidez, pero el producto de ello, sí era perceptible y sufría de anemia de ser.

Hasta ahora que hago esta reseña insolente, debo admitir que Chloe sí tenía razón en algo... Yo quería pasear, quería cantar, ¡Quería vivir!  Como por arte de magia quise hacer chico el mar para echarme un buche de agua.  Fui marisco sin concha en prolongadas turbulencias que me hirieron.

Como un helado de chocolate que no podía llevar a mi paladar, sentí entonces alguna vez mi vida. Tanta era la ansiedad que hacía temblar mis manos.  De todos esos golpes nació la urgencia de que se desvanecieran en palabras. Tornando la realidad en irreal y dando más solidez a las vaguedades. ¡Cómo he sufrido desde entonces, y me ha consumido la incertidumbre!  Todo es denso y mudo fragor en mis entrañas.  Me había tragado el recuerdo, y estuve rebosante de él, con emoción que renuncio a olvidar.  Estas recuperaciones me invaden con dolor y los contornos que con la pluma voy trazando. El anuncio de un ave nocturna, o el rechinar de una puerta, que por querer tener un poco de aislamiento, casi me la tira a patadas el hijo de Elizabeth. Usando el clásico y eficaz argumento de: "Respeto tu privacidad tocando la puerta, pero reafirmo mi autoridad como dueño de esta casa para entrar de todos modos." Tanta es mi nostalgia y mi tristeza que aún no he olvidado el ladrido de la Nena... Pedigrí de lejano aburrimiento contrastando con su alegría, que de mucho retozar dormía cansada en la madrugada arriba del sofá.  El marido de la pastora, ¡Creerán que me regañaba sólo por querer intentar levantar las heces de la perrita.

Condenado pelón.  Pero ni modo.. El señor estaba en su casa, y pues.. Yo tenía que aguantar todas y cada una de las majaderías que me decía el viejo borracho.  Con decirles que el muy simpático aparte de obligarme a vestir de payaso:  Me escondió mi acta de divorcio que me había costado tanto dinero y trabajo: Haber apostillado y tramitado en Arcos de Belén.  ¿Ahora entienden porqué ya no quiero casarme nunca?

Últimamente me ha dado por apreciar ciertos dichos populares que se dan incluso en el movimiento cristiano. Y es aquí donde quiero aplicar éste: "Predicador, predícate a ti mismo"  No es que me haga el bobo o el loco con todo lo que acabo de escribir, respecto a aquella vivencia de cuando estuve allá en Ecuador.  De antemano advierto la noción del pecado y la irreverencia en todo ello. Pero vamos a ser honestos.. Por más que adornemos a veces las cosas o queramos pensar que nunca fue así, es decir, como lo pensábamos: Sucede que fue todo lo contrario.  Ahora bien. No estoy precisamente predicándome a mí mismo.  Antes bien estoy llevando las cosas a un nivel muy extremo, o muy real, según sea el caso. Menos quiero dejar a Chloe en un mal concepto. También no se necesita ser teólogo como para darse cuenta que estoy completamente fuera de contexto; sin embargo, yo sólo digo lo que vi, lo que sentí, lo que intuí. Y rara es la vez que suelo equivocarme. Pero como ya lo dije hace un momento: Sinceramente espero que esta sea una de esas raras veces. ¿A poco no les llegó a pasar en algún momento... Que en donde creíamos que hubo una fuerte influencia o manifestación diabólica.. Ni siquiera la hubo, sino que todo salió de nuestro entenebrecido corazón?  Porque de él emanan los malos pensamientos.  Y ya que hablé de viejos cochinos.. No es que yo quiera defender al Diablo. Sólo que hay ocasiones que le queremos echar siempre a él la culpa de todo lo que nos pasa. Y no es así.  Sino que en ocasiones hacemos las cosas deliberadamente y con absoluto conocimiento de causa y efecto.

La jauría de mi memoria persigue espectros y ella misma lo es, tratando de reunir la pieza restante propuesta por el dolor en que me debato, como la mosca en la sopa, donde lo más curioso e irónico es que no hay potaje que yo comiese.  Maniatado por conjeturas nulas. Sombras nada más entre la vida de Chloe y la mía. Blandos muros incongruentes, obsesión y entusiasmo por lo insignificante.

Tal escepticismo me colma de tristeza y de impotencia a la vez. De que por lo anterior expuesto...

 Puedan asumir que le tengo mucha fe a mi sentido arácnido, pero bien dice el dicho mexicano: "Tanto peca el que mata la vaca como el que le jala la pata"

Aquí tan sólo muestro otro de mis sucesos, relatos y confesiones. Con el único propósito de que lo analicen... No como una más de mis quejas, sino como una expresión de la más cruda verdad. Por supuesto con sus particularidades históricas y culturales. Como un acto que regula la conducta social de un país inmerso en el pecado. Como símbolo que se vale de la manipulación, del terror o del miedo para alcanzar sus oscuros y sucios fines.  No obstante, yo sólo me pregunto ¿Ustedes creen muy fácil que se le puede hablar bonito a esa clase de rufianes. O sólo porque te digan: No hagas esto o aquello. No cantes cierta canción o seguro que te ira muy mal. Y que por eso vivamos toda una vida siendo amedrentados por dichas personas?  ¡Al cuerno con eso!

Y qué pasó entonces ?

Honestamente yo no podría describir esa enfermedad inexplicable, ese disparate de gran delicadeza, llamado: "Enamoramiento pasional"  La imagen que inventamos es grave intoxicación que nos agita con insensatas obnubilaciones hermosas. Hoy sólo sé que viví momentos singulares por exceso de idiotez, por ósmosis en un callejón sin salida que acabó con mi poco razonamiento y obstruyó voluntariamente mis decisiones. Que me llevó a un caos sagrado, a una situación de nebulosos absurdos. Viví una angustia gozosa, un sueño alucinante. Viví un estado de enajenación dolorosa. Estas luminosidades... si somos afortunados las vivimos no más una, dos veces.

¿Cómo con mi vida desorganizada y triste, habría entendido que vivía en otra dimensión?  Viví tranquilo mientras fui humillado y me encontrara hecho trizas. Viví un sentimiento apacible, civilizado, algo externo quizá, mientras estuve irónicamente prisionero.

Supongo que habrá varias versiones de estas cosas; acostumbro modificar a fondo lo que escribo, no sé si con acierto.  A veces, el primer impulso tiene, como los niños, gracia que se estropea con mucho cuidado.  En un chat de "Estudiantes cristianos" conocí a aquella mujer, suavemente morena, delgada, alta, y lo digo con la precisión que conservo para los acontecimientos de hace nueve años.  Viajé a Ecuador cuando mi amada me encontró habitación cerca de su casa.  Aún no convencía a sus padres de que yo fuese un buen muchacho. Para su madre yo sólo constituía la desgracia de su hija, una especie de Svengali que sería su ruina. Para mí, hoy veo a Chloe: Inimaginable ser el uno sin el otro.  Por otro lado... La entrometida de su horripilante y dominante hermana, comprendió

( según ella ): Lo que pasaba. Dándose cuenta de la urgencia por acabar de una vez con lo nuestro. Discreta, finísima y con las efectivas murmuraciones de Sarit: No percibí nunca hasta qué punto luchó para que la relación concluyese sin sufrimientos. Como quien dice: "No la supe hacer"  Por lo que me quedé sin fondos y decidí retornar, sin pensar más que en mi México lindo y querido.

Y podría mencionar aún más situaciones sobre personas que son obligadas a hacer lo que no quieren. Desde aquella que opera en las estructuras jurídicas, políticas y económicas como misterio de iniquidad, perpetuando la injusticia y prolongando el uso incorrecto del poder, hasta la violencia doméstica, experimentada milenariamente por la mujer y los hijos. Lo mismo podemos señalar respecto a las situaciones de pobreza, la marginación cultural, la intolerancia hacia las minorías, a aquellos que proponen cambio de modelos.  En nuestro continente las dictaduras militares y los gobiernos antidemocráticos se han encargado de agudizar el uso de la tortura, del asesinato, de la represión, entre quienes debemos citar no sólo a los padrotes, sino también a narcotraficantes cuyo poder ha penetrado el lazo social y está presente en casi todas las esquinas de nuestras ciudades. Lo mismo podríamos decir de la fuerza extrema en el seno familiar, la cual llega a formularse en las distintas maneras de abuso, incluyendo el maltrato y la manipulación verbal, los castigos físicos, la deslealtad, el engaño sistemático, las amenazas, y las diferentes formas de autoritarismo. ¿Qué más podría añadir en cuanto a los tratantes de blancas y sus cadenas de corrupción? ¿Qué respecto a la complicada red en torno a la prostitución y sus distintos sistemas de soborno presentes en la vida cotidiana?  El daño psicológico y las secuelas que esto genera.. Nos recuerda que somos un mundo cuyas experiencias sociales han desgarrado nuestra confianza en todo sentido. Por ende.. Trabajar la violencia en sus distintas manifestaciones es complicado, doloroso, demandante, sin embargo hay que hacerlo.           

¿Imposible volver a Guayaquil?  Johanna me escribió que tenía un policía a la puerta de su casa. Y si la lluvia era fuerte, entraba hasta la cocina, le daban una silla, periódicos y hasta café colombiano. Incluso su padre lo invitaba al sillón a ver TV para facilitarle la vigilancia.  Al llegar a mi país resolví quedarme largo tiempo. Y a veces suelo pensar rotundamente que sólo se trata de un mal sueño, pero temo decir que regresé nuevamente a Ecuador con la intención de encontrarla.  Con mi barba y el cabello hasta los hombros me disfracé de barrendero, lo que no me costó mucho trabajo.

Estando allá, un colega me dijo: ¿Otra vez por estos rumbos?  Le respondí ferozmente: La primera vez que estuve aquí me llamaste por mi nombre, ¿Quién eres?  Me contestó: ¿Por qué preguntas?  Tú sabes quién soy.  De Chloe obtuve escasa información; me bastó saber que estaba bien de salud. Forzosamente viví dos semanas de masoquismo en las calles, vacilando cada día, cada hora, si le enviaba un mensaje, si la visitaba. Decidí no hacerlo. Luego intenté llamarla por teléfono. Conturbado y para mi mala suerte: Contestó la muy estimada suegra.  Naturalmente así como volví a estas tierras, del mismo modo regresé a México pidiendo ride. Dispuse conservar la imagen de Chloe, su lugar de origen y del adiós en su país. Hoy, diez años después... Nunca volví a saber más de ella.  Asumiré que es el único suceso sabio en mi vida.  Por cierto... ¿De qué color era la Frutilla?           

    

La imaginación es tan desbridada que ocasionalmente vivimos más en ella que en la realidad. ¿Acaso imaginar no es magia cotidiana, sin cargo de conciencia y sin posible rutina?  A veces los sentidos van más lejos que la realidad misma, y son todavía más precisos al ejercitarlos. Liberamos el mundo cautivo de sus mentiras y lo nuestro verdadero es su libertad.

Hoy tras de estas líneas enemigas, mis recuerdos esculpen su estatua inaccesible. La memoria es un río sin madre ( dicho sea en toda la extensión de la palabra )  Derramada por demasía de vigor.  No sé si desvarío cuando me siento seguro de que soy mi único amigo y hermano. Y barajo las perplejidades, los tal veces, las dichas, los nuncas, los habidos y los haberes, las reiteraciones y demás.  Reúno esquirlos de tiempo en cartas destrozadas y descubro sin embargos, peros, todavías, trampas y engaños de quien amé y por ello, tuve que olvidar y recordar más.  La realidad es sólo una pero esta se puede evadir y manejarla diversamente, aun con sus leyes inmutables.

Todos vemos lo que queremos ver. Así de simple.  La imaginación se funda sobre las bases de la realidad. Estira lo infinito y cuando se contrae nos golpea la cara. Sin ella no soñaríamos, y hasta careceríamos de memoria.  La realidad es efímera, sólo un sueño, algo menos que una ilusión.

No hay grados de ella sino de su representación.

Más que un monólogo, les propongo al diálogo y a la reflexión de lo que esta fútil lectura suscite. Alcanzar la percepción de lo recóndito. Que la explicación deje estupefacto a su creador y a los que quieran leerme. Quizá algunos estarán negados para la emoción; no así para los argumentos de dicha información. Racionalizar mi subjetividad es forma válida para saber dudar. Más que preguntarse qué vale.. Preguntarse qué es; y lo que eso conlleva, es decir, mi tan inquebrantable antagonismo, a fin de reinventarse diferente a sí mismo. No importa que escritura se goce, se comprenda o incluso se aborrezca. En ella se habla el idioma de los sentimientos, a lo que se oculta insinuando, a lo que se insinúa ocultando.  El más abstracto, ridículo, nefasto, ruin y cobarde de los lenguajes no está exento de la realidad. Sabido es que de ella no escapa nadie. Es Muerte y Vida.      

Cierto día Chloe insistió en que hablara sobre ella. Me pidió que lo escribiera aquí y eso intento. Dijera un gran novelista.. Que la mejor forma de olvidar a una mujer: Es convirtiéndola en literatura. Pero como ya se habrán dado cuenta... Más de una vez he dicho un sin fin de reproches y cosas hirientes e inapropiadas. Creo que ahora le vendría bien algo de estilo al asunto. sno?

El punto es que todos deseamos que se nos recuerde. Pero con ella es diferente, porque sabe la verdad.  Quizá no la amé mucho tiempo, pero sí profundamente. ¿Acaso no es más de lo que la mayoría logramos tener?  Cuando se sintió enferma, y me enteré: Sentí que yo iba a morir de tristeza.. pero no quería decírselo.  Eran aprox. las cinco de la mañana cuando me colé a su casa. Muy a pesar de que su madre me pidió que regresara en la tarde: Insistí en verla.  Su honorable padre había salido ya de imprevisto a la farmacia a comprarle un medicamento a Chloe para regular su problema de tiroides e insuficiencia cardíaca. Y me senté con ella antes de que me corrieran. Esto debido a la impertinencia de haber llegado en el momento menos oportuno.

Pero no.. Por suerte no me corrieron. Se veía muy débil, tenía los ojos cansados, la piel pálida, pero sus manos aún eran sus manos; tibias y.. Las tomé entre las mías. Intenté imaginar un Mundo sin nosotros, y lo vacío que estaría.  Ella es muy hermosa. Uno no se cansa de mirarla. No te preocupa si es más lista que tú, porque sabe que lo es. Demasiado directa, pero jamás cruel.  La amo. Sí. Vaya que la amo.  Afortunado soy de haberla conocido y por seguir amándola.  En ocasiones la vida es como un niño que juega por capricho con nuestro gran dolor.  No puedes elegir si van a hacerte daño en este mundo, pero sí eliges quien te lo hace. Y me gustan mis elecciones. Espero que a ella le gusten las suyas. ¿Ok, Chloe Oremor?  Te amo directamente sin problemas ni orgullo; así te quiero porque no sé amar de otra manera. No hace falta decir que estoy hecho pedazos. Pero poco a poco aprendo que la vida se me está yendo de las manos. Aunque fue mejor pedir perdón que pedir permiso. ¡¿Es en serio lo que digo, o solamente lo hago para que olvide yo mis penas?! Te amo. Sí. ¡Estoy enamorado de ti!  Y sé que el amor es un grito en el vacío y que el olvido es inevitable, y que estamos condenados a ello. Porque llegará el momento en que nuestros esfuerzos tengan que volver a la tierra. Y sé que algún día, no muy lejano:  El Sol engullirá el único Mundo que tenemos. Pero mientras tanto yo te seguiré amando.

Respecto al Necromonger?  Bueno.. a pesar del alboroto, el asco y la indignación que se genera al hablar de un proxeneta... De antemano comprendo bien que, situaciones de esa índole:

Se deben explicar con extremo cuidado, mucha ética y bastante sentido común. Ahora bien... No sé lo que estoy a punto de decir. Lo diré de todas formas. Pero antes de referirme aquel sujeto, que: "Dios le pague conforme a sus hechos"  Mejor diré que en lo particular pude notar que todo es muy reposado por allá y no se percibe tanta vulgaridad como aquí en México y demás países de Centroamérica. Incluso se llega a percibir un aire de cierta religiosidad y disciplina en ello.

No por eso menos maligno: Sí anonadado del primor aún no pintado. Los paradisiacos cruces raciales con un relente de cuerpos laboriosos recién vendimiados: Aquellas tristes almas seguían... No precisamente perdidas, sino inocentes e invictas como la selva.  Que "Bella forma" de pronto junta, natural, cándida, exhibida para el ejercicio despreocupado de remotos ritos elementales.

La esbeltez, la lozanía de la mocedad disponible en el mercado moderno de la esclavitud. Todo es simple gimnasia genital sin drama, sin encantamiento, sin sorpresas momentáneas para los insensatos que pagan por aquellos servicios.  Pero tampoco sean ustedes tarados... Obvio no iba yo a estar haciéndole preguntas a Chloe que estuvieran fuera de orden.  Lógico que al enterarse sus padres, seguro me habrían mandado de vuelta a mi país... No propiamente en avión, sino más bien en un cajón funerario. O peor aún... Reducirme la cabeza hasta dejarla del tamaño de una naranja. No obstante, si tratáramos de precisar o definir toda la narración de este miserable intento de... Escritor? Sólo podría interpretarse como la más viva expresión de la repugnancia en contra del indecoroso funcionamiento psíquico de la época actual, simbolizado textualmente en la forma de un büey enfermo, morboso, estúpido y presuntuoso que únicamente busca su tragedia arrojando sin la menor humanidad a su exnovia: En brazos de una despreciable y horripilante bestia sin escrúpulos. Quizá por incapacidad, por coraje, por escarmiento, por vicio, por veleidad moral, y encima de eso: Cree tener derecho a escribir cosas indignas so pretexto de "Profundidad y pensamiento"